lunes, 12 de junio de 2017

La fuerza de la Teshuvá o arrepentimiento

13(1) Y le dijo el Eterno a Moisés: (2) “Envía a hombres para que exploren la tierra de Canaan (C’náan) que di a los hijos de Israel. De cada tribu, mandaréis a un hombre, el principal de cada tribu”. (3) Y Moisés, por mandato del Eterno, envió a los jefes de los hijos de Israel desde el desierto de Parán (4). Y estos son sus nombres: de la tribu de Rubén, Samúa (Shamúa), hijo de Sacur (Zacur); (5) de la tribu de Simeón, Safat (Shafat) hijo de Jorí; (6) de la tribu de Judá, Caleb (Calev) hijo de Jefone (Yefuné); (7) de la tribu de Isacar, Igal (Yig’al); (8) de la tribu de Efraín, Oseas (Oshea) hijo de Nun; (9) de la tribu de Benjamín, Palti hijo de Rafú; (10) de la tribu de Zabulón, Gadiel hijo de Sodí; (11) de la tribu de Manasés, Gadí hijo de Susí; (12) de la tribu de Dan, Amiel hijo de Guemalí; (13 de la tribu de Aser, Setur (Shtur) hijo de Miguel (Mijael); (14) de la tribu de Neftalí; Najbi hijo de Vofsí (15) de la tribu de Gad, Gueuel hijo de Mají. (16) Tales son los nombres de los hombres que envió Moisés a reconocer la tierra. Y a Oseas, hijo de Nun, lo llamó Josué (Yehoshúa). (17) Y envió a sus emisarios para explorar la tierra de Canaán diciéndoles: “Id por allí hacia el sur y subid a la montaña, (18), y ved cómo es la tierra y cómo son quienes la habitan, si son fuertes o débiles, pocos o muchos…” .
La parashat de esta semana, Shabat, 23 de Siván de 5777 (17 de junio de 2017), correspondiente a Bamidbar 13:1-15:41, nos cuenta acerca del triste e infortunado episodio de los espías que envió Moshé Rabenu para observar y examinar  Eretz Israel, quienes a su regreso presentaron un dictamen  desfavorable, lo que acarreó desánimo en el seno del pueblo. Tal impacto provocó dicho informe negativo que el pueblo se rebeló contra su líder y pidió volver a Egipto. Pero más triste fue el castigo ordenado por HaShem, consistente en que todas las personas mayores de 20 años morirían en el desierto y sólo la generación siguiente podría entrar en Eretz Israel que sus mayores habían despreciado.

jueves, 8 de junio de 2017

El paralelismo entre la Creación del Universo y la construcción del Mishkán

La parashat de esta semana Beha’alotjá (Bamidbar 8:1-12:16) comienza con el versículo “Háblale a Aharón y diles”. Inmediatamente después de que los príncipes de las 12 tribus de Israel acabaron de presentar sus ofrendas en la inauguración del Santuario, D-s le dice a Moshé que invite a Aharón a encender la menorá o candelabro de siete brazos. 

Nuestros exégetas y comentaristas intentaron comprender por qué este mandamiento aparece inmediatamente después de la enumeración de los sacrificios presentados por las doce tribus con motivo del estreno del Tabernáculo. El Midrash responde que, dado que la tribu de Leví (a la que pertenecía Aharón) no participó en de las mismas, Aharón se sintió mal y entonces D-s le dice que “Tu gloria es mayor que la de ellos, ya que tú encenderás el candelabro. Es decir, Aharón había sentido envidia y D-s le consuela con un precepto.

domingo, 21 de mayo de 2017

En el Desierto

En este Shabat próximo, 27 de mayo de 2017/2 de Siván de 5777) que antecede a la fiesta de Shavuot*, comenzamos la lectura del tercer libro de la Torá, el tomo conocido como Números o Bamidbar, literalmente, en el Desierto. Es decir, leemos la parashat Bamidar, Números 1:1-4:20, cuya haftará se corresponde con Oseas 2:1-22. En este tercer libro se contienen las parashiot o porciones, Bamidbar,  Naso, Beha-Aloteja, Shelaj-Leja, Koraj, Jukat, Balak, Pinjas, Matot, Mase.
En esta porción se detalla todo lo relativo al mandamiento de elaborar un censo de Am Israel y según escribe Harav Sam Kassin, de Shehebar Sephardic Center de Jerusalem (Israel), “cuando nos dimos cuenta de que nuestros antepasados pasaron 40 años viajando por arena seca y caliente, y al mismo tiempo eran capaces de una gran elevación espiritual, sabemos que para ser verdaderamente tenidos en cuenta en este mundo, uno no debe considerar dónde está, sino quién es”.