Este año vuelve a coincidir el 10 de Tevet con el primer día del añocivil, y ello nos obliga más que siempre, a recordarlo.En el día 10 del mes de Tevet, los ejércitos del emperador babilónicoNabucodonosor II sitiaron a Jerusalén. Treinta meses después, el 9 de Tamuz, cayeron las murallas y el 9 de Av de ese año el Templo fue destruido. El pueblo judío fue exiliado a Babilonia por 70 años.Ese día se observa como un día de ayuno, luto y arrepentimiento. Nos abstenemos de comida y bebida desde el amanecer hasta el anochecer, y añadimos selijot y otros agregados a nuestras oraciones.
El ayuno* se inicia en Madrid a las 7.11 horas y finaliza a las 18.29 horas, según escribe el rav Yerahmiel Barylka*.
El 10 de Tevet fue elegido para ser un "día de Kadish general" para
las víctimas del Holocausto, muchos de cuyos días de martirio es desconocido.
El objetivo es permitir que los familiares de las víctimas del Holocausto, y cuyos
aniversarios de sus muertes es desconocido, puedan observar las prácticas
tradicionales de Najalá por los difuntos, incluyendo encender una vela en su
memoria, el aprendizaje de mishnayot y el recitado del Kadish. La oración
conmemorativa también se recita en la sinagoga, después de la lectura de la
Torá en los servicios de la mañana.
Al igual que con todos los días de ayuno judío de menor importancia, el 10
de Tevet comienza al amanecer (amud ha-Shajar) y concluye al anochecer (tzeit
hakojavim). De acuerdo con las normas generales de ayunos menores que se
exponen en el Shulján Aruj, y en contraste con Tishá Beav, no hay limitaciones
físicas adicionales más allá de ayuno (tales como las prohibiciones de baño o
de usar zapatos de cuero). Debido a que es un día de ayuno menor, la Halajá
exime de ayunar los que están enfermos, incluso si sus enfermedades no fueran
potencialmente mortales, al igual que a las mujeres embarazadas y lactantes que
se encuentran en ayunar difícil. La Mishná Berurá señala que es encomiable
observar todas las restricciones de Tishá Be Av en los días de ayuno menores
(excepto la restricción al uso de zapatos de cuero).