jueves, 29 de agosto de 2013

Kol Israel Arevim ze lazé





Lectura de la Torá para Shabat, 25 de Elul de 5773

Sábado, 1 de septiembre de 2013
Parashat Nitsavim-Vaielej
Devarim 29:9-31:36
Haftará: Isaías 61:10-63:9


Esta parashat nos introduce en Rosh Hashaná y despide el año precedente. Al final de sus días, el preclaro Moshé Rabenu deja a su pueblo al que ha conducido durante cuarenta años a través del desierto, como un padre a sus hijos. Él sabía qué decir y su deseo final y testamento están preparados para cumplirse y ser impartido a su pueblo. En opinión del rabino S.Benzaquén, “esto resuena hoy más que nunca. Mirando hacia el pasado, él debe usar cada minuto que le queda de su vida para impartirles las direcciones del pasado, para asegurar un futuro duradero, para las generaciones venideras”.
“La única forma-añade-en que podemos garantizar que esto se transmita en forma directa es que cada uno escuche el mensaje de participación. –Tú estás firme este día-.Es un día de juicio. El futuro es brillante y prometedor sólo cuando ellos nunca olvidan las lecciones del pasado y solamente fue la falta de unidad lo que perjudicó sus objetivos. El plan maestro para su éxito habrá de ser:-Hacerlos participar en el acuerdo.-Moisés habló de todas las categorías de judíos. Desde los jefes de sus tribus hasta los aguateros. La única oportunidad para el pueblo judío de llegar a cumplir este acuerdo y poder mirar hacia un futuro exitoso habría de ser el estar cohesionados. A partir de ese día ningún método que no fuera la responsabilidad mutua podría tener éxito. Es esta interrelación de responsabilidad mutua del Kol Israel Arevim ze lazé (cada judío es responsable por los otros) entre los distintos estratos de nuestro pueblo.-Este día antes del gran día del juicio debemos emerger victorioso contra todos los adversarios espirituales y físicos-“.

miércoles, 28 de agosto de 2013

El mes de Elul y la raíz y esencia de Rosh Hashaná




El mes de Elul cierra el año hebreo y seguidamente lo asociamos con la Teshuvá (arrepentimiento o retorno). En esta recta final nos esforzamos por inclinar la balanza con la vista puesta en Rosh Hashaná, literalmente, cabeza de año, día en el que todos nuestros actos son examinados. Una balanza que se representa por el signo del Zodiaco de Thisrei. Contamos 12 meses, como lo son las 12 tribus de Israel. Así, pues, la tribu de Dan, raíz hebrea del verbo juzgar, corresponde al mes de Tishrei.
Tres libros se abren en Rosh Hashaná, según detallan nuestros sabios. Los piadosos son inscritos en el Libro de la Vida, los malvados en libros de muerte y los medianos quedan pendientes en la lista de espera hasta Yom Kipur.

Según señala Vidal Elgozy, “para no aterrizar de repente en Rosh Hashaná, sin previo examen de conciencia, tenemos el mes de Elul, durante el cual nos preparamos para el encuentro con el Creador. En este día debemos renovar el contrato de la vida. Los preparativos para algo de tan primordial importancia han de ser minuciosos, pues una pequeña contrariedad puede acarrear graves consecuencias”.
Con la creación del hombre, el mundo alcanzó su cenit el viernes 1 de Tishrei. Este mismo día Adam pecó, fue juzgado e hizo Teshuvá y fue perdonado.
Rosh Hashaná es el día en el que el Creador fija quién vivirá y quién no; quiénes gozarán de tranquilidad y bienestar y quiénes sufrirán; qué países disfrutarán de holgura y quienes estarán escasos o deprimidos o sufrirán hambre o guerras. Todos los acontecimientos que han de ocurrir durante el año se determinan en Rosh Hashaná, lo cual le confiere a este día el carácter de solemnidad, temor y respeto.

miércoles, 21 de agosto de 2013

Vehaiá ("Y será...)



 

Lectura de la Torá para Shabat, 18 de Elul de 5773
Sábado, 24 de agosto de 2013
Parashat Ki Tavo
Devarim 26:1-29:8
Haftará: Isaías



En esta porción Ki Tavo leemos: “Será que cuando entres en el país que el Eterno, tu D-s, te dé por heredad y la poseas y mores en él, tomarás las primicias de todo el fruto del suelo, las pondrás en el cesto e irás al lugar que eligió el Eterno, tu D-s, para hacer morar su nombre allí..”. (Devarim 26:12).
Esta parashat comienza con el término hebreo Vahaiá, que significa “Y será”.
Nuestros sabios señalan que esta manifestación indica una situación feliz. ¿Acaso existe una satisfacción mayor que la llegada del pueblo judío a Eretz Israel?

miércoles, 14 de agosto de 2013

Ki Tetse, una parashat llena de preceptos




Lectura de la Torá para Shabat, 11 de Elul de 5773
Ki Tetse
Devarim 21:10-25-19
Haftará: Isaías 54:1-10

Los tres párrafos que dan comienzo a esta parashat (que está llena de preceptos) tratan de situaciones familiares únicas, es decir: el soldado que se enamora de una chica enemiga, el hombre que tiene dos esposas, una amada y otra despreciada, y el hijo rebelde, según escribe el rabí Sam Kassim.
Agrega que “en tiempos pasados estas situaciones eran muy raras. Sin embargo, recién en la actualidad podemos realmente comprender la Torá. Hoy en día en Israel existen algunos judíos que brindan tratamiento especial a prisioneros de origen no judío. Contamos además en Israel con una institución de segunda “esposa” cuyos derechos están protegidos por ley. Y, finalmente, predominan los chicos rebeldes que eligen no seguir los pasos de sus padres”.
D-s nos dice-añade-cómo conducirnos con las situaciones presentadas arriba y esto asegura la preservación de la sociedad que se rija de acuerdo a la Torá y esté basada en el mutuo amor, paz y tranquilidad. Una parashat tan repleta de mitzvot, ubica a la familia cono sine qua non ante los demás preceptos que aparecen en el capítulo, para decirnos que debemos reforzar nuestros lazos familiares, nuestros lazos comunitarios, nuestra tradición sefaradí y nuestra herencia judaica para garantizar la perpetuidad del Judaísmo en las generaciones futuras”.

jueves, 8 de agosto de 2013

Las reglas básicas de la Justicia y el Derecho



Lectura de la Torá para Shabat, 4 de Elul de 5773

Parashat Shofetim (Jueces)
Devarim 16:18-21:9
Haftará: Isaías 51:12-52-12

“Jueces y Policías has de instalar”. La impartición y administración de justicia y la defensa de los derechos humanos conforman un valor genuinamente judaico. Cuando la humanidad se encontraba todavía inmersa en el oscurantismo político y social, regida por los que detentaban el poder de la fuerza bruta, la Torá ya legislaba al pueblo de Israel con las reglas básicas de la Justicia y el Derecho.